FÚTBOL INTERNACIONAL | Tony Adams: «Cuando Southgate falló el penalti, estuve 44 días borracho»
Tony Adams es un exjugador de leyenda. Un defensa central inglés, ‘one club man’ del Arsenal que hizo historia con el conjunto ‘gunner’. Disputó casi 20 temporadas en el primer equipo del club londinense (1983-2002) y logró alzarse, entre otros títulos, con tres FA Cups, tres Ligas, dos Copas de la Liga o una Recopa. Marcó una época en Londres, pero el alcohol lo acompañó durante todo este viaje.
El exjugador inglés se ha sincerado en una entrevista en ‘The Guardian’ sobre todo lo ocurrido a lo largo de los años. Lo ha hecho a raíz de la muerte de James W, director de su fundación y hombre al que considera su «héroe, terapeuta, patrocinador y mentor». Una persona fundamental para el cambio de vida de Adams, quien puede decir que «ya no tengo ninguna angustia por el pasado. He dejado eso atrás: llevo 28 años sin beber ni consumir drogas. Por primera vez en me siento a gusto conmigo mismo». James W le «salvó la vida y ayudó a que cientos de personas se desintoxicaran».
La primera suegra de Tony Adams fue quien le dio el número de James. La primera esposa del exjugador inglés a la que conoció cuando atravesaba una situación difícil: «Los desmayos se sucedían cada vez más”, dice Adams. “Conocí a mi primera esposa [Jane Shea] en un desmayo. La ingresé en rehabilitación porque consumía crack y me rodeé de gente enferma para que me apoyara».
1996, el año más difícil
Tony Adams vivió momentos complicados por el alcohol, como cuando una caída por unas escaleras le supuso 29 puntos de sutura en la frente. No obstante, tocó fondo en 1996. «Tenía 29 años y no quería estar en el planeta, así que fue un período muy oscuro de mi vida. Cuando no jugaba al fútbol, no quería vivir. No podía vivir. Sabía que estaba completamente atrapado y ese es el peor lugar en el que he estado. En febrero de ese año, me quitaron el fútbol porque me lesioné. En marzo, se llevaron a mis hijos. No bebí cerca de ellos, pero me desmayé un domingo por la noche. Bebí siete botellas de Chablis. Entonces la suegra se llevó a los niños», comenta el exjugador inglés.
El fútbol era el único motivo por el que alejarse de las adicciones. Ese mismo año se disputaba la Eurocopa en su país, Inglaterra y eso motivó a Adams a dejar el alcohol. Sin embargo, todo cambió en la tanda de penaltis de la semifinal ante Alemania: «tan pronto como Gareth [Southgate] falló ese penalti, el alcohol estaba en mis manos nuevamente, una borrachera de 44 días. Al final de mi borrachera, vi cosas salir del armario. Estaba paranoico. Pensé que había alguien en la casa. Pensé que estaba matando gente».
Un trabajo que continúa
“Cuando llegué el 16 de agosto de 1996, James me guio y fui a Alcohólicos Anónimos. Seguí los 12 pasos con él y eso me cambió como ser humano”, cuenta el exjugador. Un héroe, terapeuta, patrocinador y mentor que murió esta semana. El día después de su funeral, Tony Adams fue nombrado presidente de la organización benéfica nacional de adicciones y recuperación ‘The Forward Trust’.
La fundación trabaja con delincuentes en las prisiones, una tarea que le recuerda a Adams su pasado por la cárcel. Ingresó en 1990, cuando era capitán del Arsenal, por conducir bajo los efectos del alcohol y ahora quiere ayudar a personas que se encuentran en una situación parecida a la suya tiempo atrás. «Después de la cárcel, seguí bebiendo durante seis años. Lo dejé justo antes de la llegada al Arsenal de Arsène Wenger«, comenta Adams. A día de hoy, está recuperado, pero «sigue asistiendo a reuniones periódicas y visito tres o cuatro cárceles al año para transmitirles a los recién llegados el mensaje de que hay ayuda disponible».