Fútbol Internacional | ¡No sería la primera vez! Las otras huelgas en el fútbol europeo
Los fantasmas de una huelga masiva dentro del mundo del fútbol amenazan con hacer su aparición en los próximos meses. Los jugadores de la élite europea parecen haber llegado a su límite mientras las voces que instan a movilizarse toman cada vez más fuerza. La solución parece cada vez más remota mientras que los involucrados empiezan a agitar un posible parón de sus actividades a modo de protesta.
Carvajal, Rodri, Koundé, Van Dijk, Ancelotti… incluso Javier Tebas se ha sumado a unas quejas que comparten la mayor parte de los jugadores dentro de la élite europea. El aumento de la carga de partidos ha llegado a un punto insostenible para la salud de los futbolistas que prefieren cobrar menos que sumar tantos minutos en sus piernas a final de temporada. El resultado siempre es el mismo: jugadores más propensos a las lesiones que resienten a un espectáculo cada vez más distorsionado por la cantidad excesiva de encuentros.
El hartazgo ha llegado a un punto donde los futbolistas parecen estar pidiendo a gritos una posible huelga dentro del mundo del fútbol. La situación supondría un antes y un después dentro del deporte en la búsqueda de derechos de los protagonistas del espectáculo… aunque no sería un caso inaudito en la historia. El fútbol no ha estado ajeno a este tipo de situaciones desde su creación con frenazos en la actividad que han conseguido -a veces- grandes cambios para los jugadores.
Inglaterra el precursor, Italia y España siguen su estela
Inglaterra ha sido uno de los pioneros en el arte de la huelga dentro del mundo del fútbol; en 1960, antes incluso de la creación de la Premier League tal y como la conocemos hoy en día, los futbolistas ingleses -liderados por Jimmy Hill- fueron a una huelga en busca de la abolición del salario máximo, que entonces estaba en 20 libras semanales. Después de las conversaciones con distintas asociaciones, consiguieron abolir la norma y la huelga fue cancelada, una victoria que sentó un precedente dentro del mundo del fútbol.
La temporada 2011-12 fue una de las más convulsas en este sentido. En Italia y España, las competiciones domésticas tuvieron que retrasarse una jornada debido a la huelga de los jugadores en busca de nuevos derechos en su trabajo. En el país transalpino se abogó por un acuerdo sobre un nuevo acuerdo colectivo mientras que en España los futbolistas pidieron un salario garantizado en caso de que sus clubes se declararan en quiebra. Ambas movilizaciones consiguieron su propósito inicial, otro antecedente ilusionante para los jugadores que alzan su voz en la actualidad.
Estados Unidos, Portugal, Escocia e incluso España en la década de los 90‘ fueron otros de los países que lucharon para conseguir una mejora en sus derechos como futbolistas. La pelota está ahora en el tejado de los jugadores, que deben organizarse si quieren frenar el sinsentido de la UEFA y la FIFA. Su momento es ahora de dar un paso adelante sin miedo.