Fútbol internacional | La ‘desaparición’ del Papu: “Pasé de ser campeón del mundo a que no me llame nadie…»
La vida puede cambiar en un abrir y cerrar de ojos. Un día estás en lo más alto y al otro ya no eres nadie. Algo parecido le ha ocurrido a Alejandro Gómez, comúnmente conocido como Papu Gómez, a quien hace dos años, la vida le cambió para siempre. Tocó el cielo de Qatar con Argentina y casi un año más tarde, recibió la sanción más alta por dopaje.
Hacía escasos días que había firmado un nuevo contrato con el Monza cuando, en octubre de 2023, salió a la luz que había dado positivo en un control antidopaje cuando aún era jugador del Sevilla, y que le habían realizado en noviembre de 2022. El club hispalense y el propio jugador rescindieron de mutuo acuerdo su contrato en verano de 2023 y, ya como agente libre, fichó por el Monza.
SANCIÓN DE DOS AÑOS POR DOPAJE
Cuando se supo la noticia, el conjunto italiano emitió un comunicado en el que confirmaba que había recibido la notificación de sanción por dos años para el argentino. «Se constató la presencia de terbutalina en las muestras biológicas del futbolista. Se trata de un fármaco que se tomó para calmar una crisis de broncoespasmo, en octubre de 2022. La positividad es el resultado de una suposición involuntaria«, decía el comunicado.
Ahora, el Papu, que concedió una entrevista en Argentina, sueña con regresar en Italia, donde se entrena con un equipo de la Serie C. “Estoy trabajando en aceptar que el personaje del ‘Papu Gómez’ está llegando a su fin, está dejando de existir y que ahora soy una persona común y corriente, un padre de familia. Estoy trabajando el ego, de apagarlo un poco y tratar de subsistir con ‘Alejandro’“, narró.
«SE ME CAYÓ EL MUNDO»
“Pasé de ser campeón del mundo, a que hoy no me llame nadie, desaparecer del medio o no jugar más. Hay que saber convivir con eso. Ni cuando estás allá arriba eres el mejor, ni ahora eres el peor. Solo que hay que priorizar otras cosas… Después de la sanción estaba ilusionado con volver, pero cuando me cayó la pena máxima se me cayó el mundo», unas declaraciones duras.
Contó que se tomó un jarabe para la tos, del que no informó en el control antidóping con el Sevilla. “Llego a la noche, de madrugada en Sevilla, generalmente me tomaba una pastilla después de los partidos, porque me costaba mucho dormir. Me acuesto y en mitad de la noche me da un ataque de tos. Le digo a mi mujer que me de un jarabe para la tos. Estaba el de mi hijo más pequeño, de Milo, y me da una tacita pequeña. Me la tomé“.
ESTÁ VOLVIENDO A EMPEZAR
«A los días hubo un doping sorpresa, me preguntó el doctor si había tomado algo, como es habitual. Me olvidé por completo que había tomado el jarabe«, explicó. Y es que si le hubiera informado del jarabe, no hubiera pasado nada porque estaba declarado. «Pasa el tiempo y me llega por mail, a mi mail personal, que había dado positivo, cuatro días antes de la final del Mundial. Fue horrible. Imagínate, festejando y con la cabeza puesta en qué iba a pasar…“.
“No se lo dije a nadie, me parecía muy egoísta, no quería que se pensara en otra cosa que no fuera la final del Mundial«, afirmó. Ahora está entrenando en un campo sintético de la Serie C y narró que se puso a jugar al pádel, se alejó completamente del fútbol. «Lo bueno de ahora es que estoy volviendo a empezar, siendo un amateur, ahora mismo soy un chico que quiere debutar en Primera. Tengo que ir a ganarme el sitio«.