cuatro anillos y jugadores de leyenda
No se puede dominar la NBA eternamente. Los Kings batieron a Golden State Warriors por 118-94 y tendrán una bala más en el ‘play-in’ del Oeste contra New Orleans. La victoria no solo supuso una vida extra para los Kings, también el fin de la dinastía más reciente de la NBA.
De esta manera, Kings y Pelicans lucharán por el octavo puesto mientras que los Lakers avanzan como séptimos y deberán batir a los Denver Nuggets.
La victoria de los Kings significa el fin de la dinastía de los Warriors. Atrás queda el dominio de años pasados de una generación liderada por Stephen Curry, Klay Thompson o Draymond Gree. En esta temporada no ha quedado nada de aquellos Warriors que ‘barrían’ a cualquier equipo que tenían enfrente.
Una generación que pasará a la historia por conquistar hasta cuatro anillos. 2015, 2017, 2018 y 2022 fueron los años que ganaron la NBA. Una dinastía que fue liderada por Stephen Curry. El jugador de Ohio que, con un juego estratosférico y batiendo récords numéricos, logró, por momentos, eclipsar hasta al mismísimo LeBron James.
Tras finalizar el partido, Steve Kerr, técnico de los Warriors, se le vio muy afectado. El protagonismo en rueda de prensa fue para el pasado. El técnico nacido en Beirut fue preguntado constantemente por si la derrota supone el fin de la dinastía. Kerr, dolido por la situación, se mostró sincero: «Todavía es muy pronto para mí pensar en eso. Inviertes mucho en una temporada (…) y es muy emotivo, los altos y bajos de este negocio son increíbles. Por eso somos como adictos a este deporte. No puedes encontrar algo así en otro lugar de la vida, o al menos yo sé que no puedo», explicó.
Kerr se mostró muy emotivo al recordar lo vivido años atrás: «Hemos sido realmente bendecidos aquí con jugadores increíbles, múltiples campeonatos, apariciones en Finales y las cimas más altas. Esto es la cruz de eso. Así es la vida, así es como funciona: no puedes estar en lo más alto para siempre», reconoció.
¿Ahora qué?
La incertidumbre reina en los Warriors. Tras el duro varapalo que ha supuesto la derrota ante los Kings, las dudas y la inquietud corre por las venas de sus aficionados. Se abren diferentes frentes para reconstruir el equipo para la próxima temporada. Klay Thompson, que realizó un partido desastroso con 0 puntos, se aleja cada vez más de la ciudad de San Francisco. Una marcha que significaría el fin de una generación histórica.
Otras estrellas como Stephen Curry y Draymond Green sí continuarán en el equipo, pero la dirección deportiva deberá dar un vuelco a la situación y reforzar a un conjunto que se encuentra en mínimos tras poner fin a una dinastía que ha marcado época.