¿Por qué los vecinos de Stamford Bridge están molestos con Juan Carlos I, el rey emérito?
El nuevo paquete de hospitalidad para los aficionados que ha presentado el Chelsea ha desatado el enfado de los vecinos de Stamford Bridge. Los residentes han elevado sus quejas al club por los problemas que puede causar este nuevo tipo de bonos, que han relacionado con un incidente que aún recuerdan con el rey emérito Juan Carlos I como fatídico protagonista.
El equipo londinense ha puesto en venta en las últimas horas el paquete Rose & Ball, una oferta de hospitalidad del club para fanáticos habituales que permitirá una ‘experiencia de primera clase‘ con la presencia de una leyenda del club que los acompañará a saludar.
El paquete, valorado en 330 euros, ha despertado el enfado de los vecinos de Stamford Bridge, que escribieron en 2023 una carta elevando sus quejas sobre el paquete que pone en oferta el Chelsea, relacionándolo con los problemas que ya causan los asistentes VIP a los partidos del equipo.
La relación con el emérito Juan Carlos I
La carta explicaba muchos de los problemas que los vecinos tienen cuando este tipo de aficionados acuden al estadio: «El consumo de drogas es muy visible, a menudo se observan comportamientos de ebriedad, orinar e incluso defecar. Todas las carreteras de aquí se convierten en un aparcamiento en doble fila para los VIP«, explicaban.
Los residentes han relacionado su enfado con un incidente que tuvieron con el rey emérito Juan Carlos I: «Un ejemplo, el Rey de España asistió a un acto donde estos vehículos bloquearon el acceso a nuestra carretera durante un largo periodo de tiempo, con los motores en marcha, emitiendo humos… tuvimos los vehículos de la comitiva del Rey de España flotando delante de nuestras casas durante horas…», explicaban con molestia.
Los vecinos se refieren al antecedente más reciente donde el Real Madrid visitó al Chelsea la temporada pasada, un partido que tuvo a Juan Carlos I como asistente al estadio provocando, según los residentes, un auténtico caos en los alrededores del estadio. Una historia que no parece tener fácil solución…